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1. Jesús, el Propósito de la Natividad:

En el latín, «adventus» significa llegada o aparición. El advenimiento de Jesucristo destaca la centralidad de su mensaje en la Biblia. Recordar la natividad es recordar el propósito divino de reconciliar a la humanidad con Dios. Jesús vino a salvar lo que estaba perdido, cumpliendo el plan salvador de Dios.

2. La Entrada de Dios al Mundo:

Desde la creación en Génesis, Dios demostró su omnipotencia. Sin embargo, la llegada de Jesús marca un momento único. Dios se hizo carne, naciendo de la Virgen María. Este milagro evidencia que Jesús es Dios encarnado, el mismo Dios del Génesis que dijo: «Hagamos al hombre a nuestra imagen.» Jesucristo vino para resolver el problema del pecado y la condenación eterna.

3. Jesús Entre Nosotros:

En la casa del Señor, experimentamos la presencia especial de Dios. Venimos a adorar explícitamente, buscando un encuentro con nuestro Creador. Jesús, siendo Dios, transforma nuestras vidas en su presencia. Recordemos las experiencias sobrenaturales desde el nacimiento de Jesús hasta sus milagros, mostrando que Él es el Salvador del mundo.

4. Dios se Hizo Carne para Salvarnos:

Dios deseaba una relación directa y perfecta con la humanidad, como en la época de Adán. Sin embargo, el pecado introdujo muerte, enfermedad y egoísmo. El hombre no podía salvarse por sí mismo. Por eso, Dios provee el medio de salvación: Jesucristo. La Navidad es la expresión máxima de este esfuerzo divino por alcanzarnos y salvarnos.

En esta época de advenimiento, compartamos el amor de Jesús con otros, reconociendo que solo a través de Él podemos hallar salvación y vida eterna. Que este mensaje transforme nuestros corazones y nos lleve a adorar al Dios encarnado.

Atentamente: Pastor Guillermo Ayala

Citas Bíblicas:

– Juan 1:1-5

– Juan 1:13-15