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El Impacto Duradero de la Crianza en la Fe
Proverbios 22:6 “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.”
La herencia que dejamos en el corazón de nuestros hijos es más valiosa que cualquier tesoro terrenal. Cada palabra, cada enseñanza y cada ejemplo que ofrecemos a nuestros hijos tienen un impacto duradero en su vida, especialmente en lo concerniente a su fe y su relación con Dios.
Recuerda la importancia que tiene el guiar a tus hijos en el camino de Dios desde una edad temprana. La herencia espiritual que les dejamos es un legado que perdurará en sus vidas, guiándolos siempre hacia Dios.
Deuteronomio 6:6-7
Y estas palabras que te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
Dios nos llama a enseñar constantemente a nuestros hijos acerca de sus mandamientos y su amor, integrando la fe en cada aspecto de sus vidas diarias.
La herencia del corazón trasciende generaciones. Es más que simplemente enseñar versículos bíblicos o llevar a nuestros hijos a la iglesia. Implica modelar el carácter de Cristo en nuestras vidas y enseñar a nuestros hijos a amar a Dios sobre todas las cosas y a amar a su prójimo como a sí mismos. Es un compromiso constante de guiar y disciplinar en amor, de orar por ellos y con ellos, y de confiar en que Dios cumplirá su promesa de que, cuando sean mayores, no se apartarán del camino que les hemos enseñado.
Tito 2:3-5 Las madres mayores están llamadas a enseñar a las más jóvenes a vivir con sabiduría, pureza y sumisión a la Palabra de Dios.
1 Pedro 5:5 Y todos vosotros, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.
Este versículo nos recuerda la importancia de la humildad en nuestra crianza y enseñanza, tanto hacia nuestros hijos como hacia otros miembros de la comunidad cristiana.
1 Corintios 13:8 El amor nunca deja de ser.
El amor como la fuerza duradera que sostiene nuestra crianza y enseñanza, guiándonos a amar a nuestros hijos con la misma gracia y amor que Dios nos muestra.
Hoy, tómate un momento para reflexionar sobre la manera en que estás dejando una herencia espiritual en el corazón de tus hijos. ¿Estás siendo un ejemplo consistente de amor y fe para ellos? ¿Estás dedicando tiempo para enseñarles acerca de Dios y su palabra en la vida cotidiana? Ora para que Dios te ayude a ser un mejor padre o madre espiritual y a cultivar una relación más profunda con Él en tu hogar.
Atentamente Pastor Guillermo Ayala
Versículo bíblicos:
Proverbio 22:6
Tito 2:3-5
1 Pedro 5:5
1Corintios 13:8
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