El Éxito según el Evangelio

por Oct 10, 2023

Tiempo de lectura estimado: 5 minutos.

Hablamos sobre el final de una serie que abordó el regreso del pueblo de Israel del cautiverio en Babilonia, que duró aproximadamente 70 años. Destacamos cómo en ese tiempo, varias generaciones experimentaron cambios significativos. El regreso del pueblo fue liderado principalmente por Esdras, quien restauró la adoración en el Templo de Jerusalén, y Nehemías, encargado de la reconstrucción de las murallas de la ciudad para su protección. Estas reformas abarcaron tanto lo material como lo espiritual.

Sin embargo, a pesar de las reformas materiales y la restauración de la adoración en el Templo, aún faltaba algo en el corazón del pueblo. A pesar de haber sido testigos de milagros y señales divinas, como las plagas, no hubo un cambio genuino en sus corazones. A veces vemos milagros y señales de Dios, pero el verdadero cambio en el corazón solo puede ser obra de Cristo Jesús a través del Espíritu Santo.

Enfatizamos la necesidad de que el cambio en el corazón sea obra de Cristo Jesús y no simplemente una respuesta a eventos externos. Reconocemos que nadie puede afirmar haber vivido una vida sin pecado, ya que todos hemos cometido errores en algún momento. Es crucial comprender la importancia de la obra de Jesucristo para la redención de los pecados y cómo su sacrificio permite que las personas encuentren la verdadera satisfacción espiritual.

Un ejemplo poderoso es el testimonio del famoso motociclista Evel Knievel que, a pesar de tener éxito en el mundo material con autos lujosos como Rolls Royce, Ferraris, Lamborghinis y aviones, se sentía vacío en su interior. Sin embargo, cuando este motociclista encontró a Jesucristo, experimentó una transformación interior que llenó ese vacío en su vida. Destacamos que muchas personas famosas, incluidos cantantes y actores, han tenido encuentros similares con Jesucristo y han encontrado una luz en medio de la oscuridad de sus industrias. La fe en Cristo puede transformar profundamente a las personas y llenar el vacío que las posesiones materiales no pueden llenar.

Exploramos el libro de Lucas, donde Jesús tiene una conversación con Elías y Moisés acerca de su partida, que se refiere al próximo éxodo que está a punto de ocurrir en la vida de las personas cuando reciben a Jesucristo. Relacionamos esta partida con la idea de dejar el mundo de las tinieblas y entrar en el mundo de la luz y el amor de Jesucristo.

También abordamos la expectativa de vida en la Tierra, mencionando que la Biblia dice que son 70 años, o 80 si uno es robusto. Reconocemos la importancia de mantener la salud y la movilidad en la vejez. Destacamos que la bendición y el éxito se encuentran al recibir a Jesús en la vida, y cómo esta experiencia es como un nuevo éxodo hacia una vida mejor y más luminosa.

Subrayamos la importancia de la vida eterna y de conocer a Dios y tener a Jesucristo en el centro de la vida. Enfatizamos que el éxito no se trata de posesiones materiales, títulos o ingresos anuales, sino de tener la vida eterna asegurada con Dios. Destacamos que el mayor milagro que Jesús puede hacer en la vida de una persona es la salvación. Nos preguntamos cuántas personas están seguras de que, si murieran en ese momento, estarían con Cristo en la eternidad.

Ponderamos cómo en el mundo a menudo hay una percepción equivocada del éxito, centrada en cosas materiales, mientras que el verdadero éxito está en tener una relación con Dios. Mencionamos la parábola del rico y Lázaro como una advertencia sobre las consecuencias de vivir sin Cristo y la importancia de buscar a Dios mientras estamos vivos.

Finalmente, concluimos destacando que la salvación es el elemento clave y que las buenas obras no son necesarias para obtenerla, sino que son recompensas adicionales en la vida cristiana. Subrayamos que el éxito en la iglesia no debe basarse en números o parámetros mundanos, sino en el cumplimiento del llamado de Dios. Afirmamos que la iglesia no es grande en números, pero sigue sirviendo fielmente y que seguirá predicando el Evangelio sin importar las circunstancias financieras. Nos comprometemos a trabajar y orar para que Dios traiga más almas a su iglesia.

Además, resaltamos la victoria de Jesús sobre Satanás y cómo Él derrotó al enemigo y le quitó todo su poder. Explicamos que esta victoria se comparte con los creyentes y que, a través de Cristo, los seguidores tienen autoridad sobre los demonios y pueden realizar obras poderosas en el nombre de Jesús.

Atentamente, Pastor Guillermo Ayala.

  • Esdras 13:3-31
  • Lucas 9
  • Lucas 11:22
  • Efesio 18
  • Juan 12:9

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Share This